Paradigma de un fenómeno excepcional: apenas lo hemos visto y de nuevo vuelve a desaparecer. Podría ...
Prestaciones
Paradigma de un fenómeno excepcional: apenas lo hemos visto y de nuevo vuelve a desaparecer. Podría ser por la «S» en la trasera. Y es que, en Porsche, esta letra es siempre sinónimo de máxima potencia, más allá de cualquier convencionalismo.
El motor bóxer biturbo de 6 cilindros y 3,8 litros del 911 Turbo S Exclusive Series desarrolla 446 kW (607 CV), es decir, unos 19 kW (27 CV) más que el del 911 Turbo S. Este aumento de potencia se debe al Powerkit Exclusive, que está disponible de forma exclusiva para el 911 Turbo S Exclusive Series. Mediante una mayor presión sostenida de sobrealimentación, el motor alcanza sistemáticamente el par máximo de 750 Nm. Consigue acelerar de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos. Y necesita 9,6 segundos para alcanzar los 200 km/h. Su velocidad máxima: 330 km/h.
Todo esto es posible gracias al característico motor bóxer del 911. Realizado en arquitectura ligera, permite un extraordinario equilibrio de masas con un funcionamiento sin vibraciones. Su baja posición en la parte trasera proporciona al vehículo un centro de gravedad bajo. La lubricación por cárter seco está integrada en el motor. Se emplean bielas forjadas, así como émbolos de aluminio forjados que se desplazan en los cilindros de aleación de aluminio y silicio. Dos turbocompresores de geometría variable (VTG) proporcionan una respuesta dinámica, elevados valores de par motor y unas cifras de potencia extraordinarias.
Dicho de forma sencilla: basta con ejercer una ligera presión sobre el acelerador para desatar de forma desenfrenada no solo el 911 Turbo S Exclusive Series, sino también a su propio ritmo cardíaco.
Mayor potencia requiere más control. De acuerdo con este principio, hemos equipado el 911 Turbo S Exclusive Series con el sistema de regulación del chasis Porsche Dynamic Chassis Control (PDCC), que permite una estabilización activa del balanceo y un comportamiento más neutro en conducción.
También a bordo: el Porsche Stability Management (PSM), el sistema de tracción total Porsche Traction Management (PTM) y, por supuesto, otros sistemas para mejorar el comportamiento dinámico. Por ejemplo el eje trasero direccional, el Porsche Active Suspension Management (PASM) y el Porsche Torque Vectoring Plus (PTV Plus), incluyendo el bloqueo del diferencial de gestión electrónica del eje trasero.
Porsche Active Aerodynamics (PAA) adapta de forma automática el spoiler frontal y el alerón trasero al modo de conducción actual y proporciona siempre los valores de rendimiento óptimos en relación con el agarre y la resistencia aerodinámica. Cuando el spoiler frontal y el alerón trasero se encuentran completamente desplegados en la posición de máximas prestaciones, puede verse el anagrama «turbo S» en el labio del spoiler frontal.
Derivados directamente del automovilismo de competición: el sistema de frenos cerámicos Porsche Ceramic Composite Brake (PCCB) y la fijación central de las llantas de 20 pulgadas.
Chute de adrenalina con solo pulsar un botón. Piel de gallina incluida. Gracias al paquete Sport Chrono de serie se le podrá proporcionar al chasis, al motor y a la caja de cambios un ajuste aún más deportivo y catapulsarse a nuevas esferas de la conducción deportiva.
Gracias al selector de modos del volante, inspirado en el del 918 Spyder, podrá alternarse entre cuatro ajustes: normal, SPORT, SPORT PLUS y personalizado, que le permite adaptar el vehículo a su estilo de conducción personal.
Con el modo SPORT PLUS activado, por ejemplo, el motor tiene una respuesta todavía más directa y el cambio PDK se ajusta para lograr unos tiempos de cambio extremadamente cortos, así como para unos puntos de cambio óptimos para máxima aceleración y procesos de cambio perceptiblemente activos. El PASM, el eje trasero direccional y el PDCC permiten una amortiguación más deportiva y un giro más directo en curvas. Además, el spoiler frontal y el alerón trasero, como parte del Porsche Active Aero dynamics (PAA), se sitúan en la posición de máximas prestaciones. El Launch Control permite la mejor aceleración de salida posible, propia de los circuitos.
¿Aún quiere más? Pulsando el botón situado en el centro del selector de modos se activa la función SPORT Response y el motor y la caja de cambios se preparan para el mayor despliegue de potencia posible. En otras palabras: la máxima capacidad de respuesta durante unos 20 segundos. Por ejemplo, para maniobras de adelantamiento.
¿Qué es lo que queda? El deseo del conductor de que el viaje no termine nunca. Para todos los demás, una fugaz vista de la trasera del 911 Turbo S Exclusive Series.